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lunes, 10 de diciembre de 2012

La "caverna numinosa". Iglesia de San Juan Bautista de Alarcón. Jesús Mateo. (Gustavo Bueno I.)

   
En el interior de la antigua iglesia desacralizada (200 años sin culto) de San Juan Bautista de Alarcón (Cuenca) se encuentra una de las obras más sorprendentes de la pintura contemporánea mundial. Se trata de los murales realizados por el conquense Jesús Mateo en una superficie de más de 1.500 m2 (entre lienzos de pared y bóvedas).

La iglesia, de imponente rigor herreriano, data del s. XVI. Mateo se enamoró de ella y enseguida inició largas y prolijas negociaciones con la Iglesia para poder decorar su interior. En 1995 empezó el trabajo. Lo acabó siete años más tarde.

Utilizando pintura acrílica sobre una superficie preparada sobre la piedra (esto permite que la pintura le pertenezca a él aunque el edificio siga siendo de la Iglesia), Jesús Mateo consiguió una obra titánica digna de otros tiempos.
La unidad estilística de una obra tan enorme indica el estado de gracia en que se encontraba el artista durante su realización. De entrada, el impacto cromático de sus colores terrosos y cálidos es inevitable. No hay descanso para una visión que se siente invadida y abrumada por tal intensidad. Por otra parte, la combinación de figuras abstractas, formas orgánicas pedestres y sésiles, grafías aparentemente espontáneas, huecos oscuros, manchas, perfiles y rostros se combinan y suceden frenéticamente (no se puede dejar de pensar en Altamira, en los bestiarios medievales, en la colorista pintura románica, en un Bosco agigantado y deformante, mas asimismo en figuraciones nunca vistas hasta la aparición del microscopio), pero sus pautas y ritmos se van asentando y adquiriendo carácter inequívoco a medida que se va contemplando todo el interior. Se podría decir que es una creación que representa un momento de creación (¿de la Creación?). 
Todo este conjuntado caos, toda esta sensación de cinética bullente queda atrapada en el sólido esqueleto de la perfecta estructura arquitectónica. El resultado general es sensacional. "Caverna numinosa" la llamó Gustavo Bueno (otro día volveremos a ello).
Hay que ir a Alarcón.


4 comentarios:

  1. Es impresionante, ¡y enorme! Hay que verlo. Qué pena que no lo haya pintado mi tío.

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  2. Me parece que tu tío (otro J.M.) sería bien capaz de hacer algo parecido.

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  3. Yo diría que con "mi tío otro J.M." no especificas mucho...

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  4. Buenos dias Lucas,
    Doy Jesús Mateo.
    Te doy las gracias por el artículo.
    Un abrazo.
    Jesús
    www.jesusmateo.com
    jesusmateo@jesusmateo.com

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